En la demanda civil que enfrenta al comparador de compras británico Foundem con el buscador Google, un juez de la Corte Suprema del Reino Unido ha puesto al gigante tecnológico en un grave compromiso. Foundem contrató al SEO Philipp Klöckner para revisar los documentos de Google presentados ante el tribunal como parte de su defensa. Ahora el juez le exige a a los de View Mountain que muestren al experto los documentos que hacen referencia al algoritmo de búsqueda.
Una historia que empezó en 2013
Foundem demanó a Google en el año 2013. Su demanda se basaba en que el comparador fue castigado y degradado en los resultados del buscador cuando los de View Mountain introdujeron sus propios resultados de Google Shopping. Además, Foundem también fue una de las voces más críticas durante las investigaciones antimonopolio de la Comisión Europea.
La empresa argumentó en ese momento, según el Wall Street Journal, «que desindexó a la compañía porque gran parte de su contenido había sido copiado de otros sitios, lo que, según dice, implica una rebaja automática en los resultados de búsqueda». La Comisión Europea finalmente descubrió que Google «había abusado de su posición en el mercado». Y multó a la compañía con 2.7 mil millones de dólares por favorecer su propio contenido. Después se vio obligada a realizar cambios en la forma en que administra y presenta los resultados de Google Shopping en la UE. Esos resultados renovados han sido objeto de controversias y objeciones por parte de los motores de compras de comparación europeos. Pero la demanda legal de Foundem fue archivada ese mismo año.
Continúa la demanda civil contra Google
Mientras tanto, la demanda civil ha seguido su curso, llegando a su punto culminante. Foundem finalmente contrató al SEO Philipp Klöckner para revisar los documentos de Google presentados ante el tribunal como parte de su defensa en el caso. Según los informes, esos documentos «explican la operación y los objetivos de los algoritmos de clasificación de Google, y cómo se han aplicado a los sitios de comparación de compras en general y a Foundem en particular».
Google se opone a Klockner como experto porque actualmente es un «SEO que trabaja». La compañía también argumenta que Klöckner es un experto parcial porque consultó con otras compañías que dieron testimonio a la Comisión Europea sobre las supuestas prácticas anticompetitivas de Google.
La evidencia documental presentada por Google en apoyo de la neutralidad de su algoritmo parece ser central para su defensa. Pero el juez del Reino Unido ha dejado claro que Google puede retirar la evidencia o que Klöckner debe poder ver esos documentos que explican el funcionamiento de su algoritmo.
El resultado de esta demanda, por el momento, es incierto. Por un lado está por ver la decisión que tomará Google en todo esto. Y, por otro lado, existe un informe realizado por terceros que demuestra que el descenso de la posición de Foundem en el buscador se debe a sus malas prácticas en SEO.