Para este 2015 las tornas cambian, aunque sea sólo un poquito se notará a lo largo y ancho de este nuevo año. Poco a poco irán surgiendo nuevas utilidades y herramientas que nos harán desviarnos del camino ya establecido, pero hacia otro aún mejor que el anterior.
Comenzamos haciendo un llamamiento a todos aquellos a los que el marketing de contenidos les parezca un absurdo del mundo online. Una vez más, es este el que se erige como herramienta principal y de auxilio para el buen funcionamiento de una estrategia de marketing digital. Contra todo pronóstico el marketing de contenidos sigue siendo el más utilizado por las empresas a la hora de dirigirse hacia sus consumidores, consiguiendo así captar su atención de la forma más personal que existe hoy en día.
Por ello continuamos mencionando las redes sociales, como asociado del marketing digital para que, ambos, unidos bajo un manto de palabras y frases claves lleven a la compañía a la consecución de uno de sus objetivos más peliagudos: obtener el poder sobre un consumidor multi-informado.
El e-mail marketing continuará en la cresta de la ola, por encima de las ya citadas redes sociales. Su carácter formal y personal, al mismo tiempo, hacen de este uno de los elementos más poderosos de nuestro mundo online. Las newsletter son un potente instrumento para dirigir a nuestros clientes a la compra de los productos. Eso sí, si lo sabes hacer sino olvídate de tu base de datos ya que la gran mayoría se darán de baja, y algunos, incluso, podrían llegar a denunciarte como spam.
Por ello ahora más que nunca el presupuesto en marketing de contenido debe elevarse más allá de la falda del presupuesto general del marketing. ¡Ha conseguido que hasta el SEO le preste su mano para no soltarla jamás! Así es la relación existente entre ambos, una relación directa y cada vez más estrecha.
Sin embargo algo está cambiando, aunque en pequeñas dosis y no se mostrará por completo hasta bien entrado el año… El marketing de contenidos está sufriendo una renovación enfocada hacia la distribución eficaz de la información, sobre, la que era su fin principal, la creación de datos e información. Ahora las personas han aprendido a priorizar sus búsquedas por ello, las empresas comenzamos a priorizar qué contenido es reutilizable, qué contenido merece la pena, qué contenido debe ser estudiado, y todo ello bajo una atenta mirada que presta atención al detalle de cada documento.
¿Demasiado trabajo? ¡Lo siento, es lo que hay! Ya mi abuelo decía que quien algo quiere algo le cuesta, así que ¡manos a la obra, ojos de búho al acecho!