Contra la publicidad engañosa y la divulgación de cánones de belleza distantes a la realidad: nuevas leyes. Los dirigentes noruegos propugnan en su corte una nueva legislación a fin de poner freno a la difusión de imágenes engañosas de la belleza irreal.

Labios grandes, pestañas voluminosas o pieles sin imperfecciones son un día a día en redes sociales. Lo que en un principio se popularizó como una medida para esos días malos que eliminaba la típica ojera de no dormir bien. En poco tiempo llegaron los adeptos a esta nueva moda. La moda de la belleza instantánea. En un solo clic millones de opciones a nuestro alcance. Adiós al Photoshop. Los filtros eran la tendencia al alza. Tanta es la atracción que despierta esta prácticas que en los últimos años se ha multiplicado el número de intervenciones quirúrgicas y tratamientos estéticos que imitan los rasgos identificativos de esos mismos filtros digitales. Una de las operaciones más demandadas es la conocida por “Foxy eyes”, el procedimiento para conseguir cejas más levantadas.

En este camino se suman las figuras de interés, los llamados Influencers, los prescriptores y embajadores de marcas que se cuelan en nuestra vidas diarias. Estas personas poseen gran habilidad de comunicación y atraen a una audiencia que finalmente acaba siendo parte de una gran familia. Debido a su popularidad y don de gentes muchas empresas recurren a ellos para promocionar sus productos. Sin embargo, muchos de estos representantes no exponen de forma objetiva la realidad. Envueltos en el elixir de la imagen bonita acaban ofreciendo reproducciones dudosas. Es en este escenario donde el país nórdico alza la voz y proclama su nuevo decreto. El fin de los retoques digitales estéticos con fines promocionales.

El Ministerio Noruego de Infancia e Igualdad aprobó la ley por la cual las imágenes promocionales retocadas mediante estos filtros virtuales deberán de incluir una etiqueta a modo informativo. Este distintivo que será diseñado por el gobierno. Advierte de retoques fotográficos de programas de edición o de los famosos filtros de redes sociales. Esta nueva normativa se extiende a prensa escrita, revistas y periódicos. También se podrá ver en carteles de marquesinas y vallas publicitarias.

Algunos de los influencers más famosos ya han manifestado su opinión ante esta nueva orden mostrando toda su simpatía y apoyo. Se muestran a favor dado que consideran que esta medida ayudará a frenar el impacto negativo de dicha publicidad especialmente enfocada en el público más joven. Además, consideran que esta norma debería extenderse más allá de las acciones puramente comerciales. No obstante, lo difícil sería poder identificar las imágenes reales de las que no lo son.

La respuesta de Europa

No es la primera vez que en Europa se reclama veracidad en su contenido comercial. Hace solo unos meses Reino Unido recurría al hashtag #FilterDrop (#FueraFiltros) en la campaña impulsada por la maquilladora y modelo Sasha Pallari la cual limitaba el uso de filtros entre influencers. Esta iniciativa que obtuvo todo el respaldo del organismo de autocontrol publicitario Advertising Standards Authority (ASA) consiguió que agencias de fotos como Getty Images eliminaran de su base de datos fotos de modelos con retoque. Así mismo, Francia obliga a las publicaciones de moda a señalar cuáles de sus fotos han sido modificadas con Photoshop.

En España el uso de estos filtros no ha llegado a alcanzar la relevancia y trascendencia de la que otros países europeos han sido testigos. Sino que su empleo es menos frecuente y sutil. Esto es consecuencia de la buena praxis de marcas y agencias de moda españolas que velan por la veracidad y el principio de autenticidad. En muchas ocasiones estas agencias validan el contenido de los influencers antes de que estos publiquen en sus redes sociales sus mensajes. Este proceso es el consecuente de que actualmente no se disponga de una ley explícita sino de recomendaciones de vigilancia de los propios patrocinadores.

Entusiasta de la cultura en general. Apasionada de la literatura. En su mundo, ciencias y letras van de la mano. Creativa, resolutiva y en constante aprendizaje. Cinéfila de corazón, le encanta pasar el tiempo descubriendo nuevos metrajes. Ahora le ha tocado el turno al Marketing Online