Los emojis fueron creados hacia finales de la década de los 90’por el japonés Shigetaka Kurita para la plataforma de internet móvil NTT DoCoMo, la operadora móvil de NTT (Nippon Telegraph and Telephone Corporation). Su equipo creó un conjunto de 176 caracteres de 12×12 pixels basándose en símbolos ya existentes de aspectos de la cultura japonesa.
Con el tiempo, aunque originariamente tan sólo se encontraban disponibles en Japón, varios caracteres emoji han sido incorporados al estándar Unicode, permitiendo con esto una amplia disponibilidad. Como resultado de esto, los smartphones son capaces de mostrar emojis sin requerir ser parte de un operador de telefonía japonés. También se encuentran disponibles en servicios de correo electrónico como Gmail, así como también en aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp, Tango Spotbros, Telegram y Hangouts. Posteriormente, sistemas operativos como Android a partir de la versión Jelly Bean o servicios como Twitter o Facebook los soportan.
Por ese motivo, una buena parte de los emoticonos que tenemos disponibles nos parecen tan ajenos. Por eso hay tantos emojis que hacen referencias a elementos orientales. No, no se trataba de una invasión encubierta. Simplemente estaban ahí. Pero tranquilos, Unicode Consortium, la organización encargada de la estandarización de los emojis va efectuando actualizaciones con nuevas caritas, monigotes y dibujitos diversos con los que amenizar nuestros chats y nuestros mensajes.
Y, para el año que viene, se espera una importante remesa de nuevos emojis, la actualización Unicode 9.0. Esta ampliación se efectuará, según está previsto, hacia junio del 2016, tras una dura selección entre los emoticones candidatos. No es una selección fácil, regida por valores como colores, formas y calidad en el diseño del emoticono, pero también por su utilidad. Y es que Unicode estudia el uso que se hace de estos términos y dibujos en Internet, teniendo en cuenta la demanda de los usuarios y su verdadero uso. Durante el mes de mayo, el Comité Técnico de Unicode, seleccionará los definitivos.
Para que os vayáis preparando, aquí tenéis una tabla con todos los candidatos, separados por categorías:
Es una colección de 74 emojis entre los que podemos encontrar de todo: caritas nuevas, expresiones, animales, platos de comida. Sorprende, entre ellos, encontrar el ya clásico facepalm, la cara de náusea o un simpático sombrero vaquero (aunque no sabemos la utilidad de este último). También se ha listado a un príncipe, una mujer embarazada o incluso el gesto del selfie. Cuestiones que pueden dar bastante juego en conversaciones y chats. Destaca también el plato de paella que tanto se han esforzado en llevar a Unicode (#paellaemoji).
Eso sí, aún habrá que esperar para ver las formas, colores y seleccionados definitivos. Y lo que es peor, una vez que se aprueben en junio de 2016, habrá que esperar a que aplicaciones como WhatsApp y otras plataformas los integren en su colección. Por tanto, más vale esperar con paciencia a esta nueva colección.