A diferencia de las páginas web estáticas un sitio web dinámico es más funcional permitiendo a los usuarios interactuar con la información que hay en la web. La base de una web dinámica es la misma que la de una estática. La diferencia reside en que las dinámicas emplean una composición de órdenes de comandos por parte del servidor y del cliente. Los scripts por parte del cliente refieren al código que ejecuta el navegador en cambio los de la parte del servidor vienen ejecutados por el mismo servidor.

En una web dinámica los elementos varían constantemente, son interactivos y eficaces. Este dinamismo hace que aparte de ser informativos sean más versátiles aunque complicados en cuanto a diseño se refiere. Por lo tanto crear un sitio web dinámico requiere de más tiempo y los costes iniciales son un poco más altos respecto a los estáticos.

Actualmente las páginas web que se crean son mayoritariamente dinámicas, empleando lenguajes de programación como PHP y permitiendo la configuración de toda clase de funciones. La actualización del contenido en este tipo de página se modifica de manera sencilla y habitual.

En cuanto a ventajas, las web dinámicas tienen infinidad de posibilidades, pudiendo crear desde una página informativa hasta un portal con toda clase de funciones. Al poder actualizarse constantemente mejoraremos el posicionamiento en los buscadores proporcionándonos mayor visibilidad y atrayendo más público para nuestra marca. Si nuestra web está dotada de un buen gestor de contenidos (por ejemplo WordPress) podremos modificar fácilmente textos, imágenes y añadir más páginas. También nos permiten realizar diseños responsive lo que facilitará la adaptación de nuestra web en todo tipo de dispositivos.

Bibliotecaria frustrada que un día descubrió el potencial que tenía de creatividad y después de varios cursos de marketing decidió explotarlo en redes sociales y terminó haciéndose community mánager de diferentes empresas y artistas. Le encanta el silencio pero es melómana hasta la médula, puro espíritu de contradicción. Fanática de libros, películas y series de terror. Vive mirando una estrella, siempre en estado de espera.