Una imagen dice más que mil palabras. Esta es la premisa por la que las infografías son una herramienta esencial cuando nos disponemos a elaborar una exposición de cara al público. Las infografías utilizan recursos descriptivos e interpretativos a fin de transformar los textos en imágenes.

El ser humano está programado para retener más información visual que en otro formato. Estudios demuestran que la capacidad para recordar lo que vemos es un 50% mayor que aquello que leemos u oímos. Esto es consecuencia directa de poseer en nuestro cerebro un número mayor de neuronas dedicadas al procesamiento visual, que a cualquier otro sentido. Es por esa razón que las infografías se convierten en indispensables a la hora de sintetizar datos o exponer conceptos clave. Su poder reside en su capacidad de narrar una historia comprensible, fácil de recordar y que además elimina en muchas ocasiones barreras lingüísticas y culturales.

En reuniones de trabajo es la reina de las presentaciones. En ocasiones el reducido tiempo que disponemos para hacer reuniones debido a las obligaciones diarias de cada uno de los integrantes hace complicado explicar de manera detallada muchos de los factores importantes que necesitamos transmitir al equipo. La configuración de las infografías favorece la decodificación de la información, con lo que facilita la rapidez de comprensión y aprendizaje.

Para preparar una buena infografía no debes prescindir de los criterios periodísticos, una forma para contemplar todo el conocimiento y no olvidar nada en el tintero, es responder al qué, quién, dónde, cuándo, cómo y por qué como si de una noticia se tratara, pero esta vez respondiendo con elementos visuales. Así mismo, se debe corroborar que la documentación sea veraz y actualizada.

El camino a la infografía perfecta

Identifica los objetivos

Lo primero es identificar el propósito final de la infografía. La intención del mensaje repercutirá en su diseño. Existen diferentes tipos según su funcionalidad. Por tanto, nos serviremos de diferentes modelos según si lo que se busca es explicar un concepto, el proceso de realización de una tarea, notificar datos estadísticos o resumir un documento escrito.

Documenta tus fuentes informativas

El siguiente paso es recopilar datos sobre el tema que debemos abordar, recolectar la información siempre de fuentes contrastadas. Se recomienda el uso de buscadores académicos especializados como Google académico, Academia.edu o Scielo, entre otros.

Este es el momento de la corroboración. Confirma la veracidad de tus argumentos mediante la revisión de documentos contrarios. Este proceso ofrece diferentes perspectivas de un mismo tema lo que favorece a la mirada global.

Ordena la información

Segmenta, estructura y pon orden a tus datos. Clasifica en carpetas, planifica tu discurso. Puedes realizar resúmenes o esquemas de los datos más relevantes, o desechar aquellos que creas que no se ajustan a tu presentación.

Selecciona la herramienta

Existen diversas herramientas para la creación de infografías. En Internet puedes encontrar diferentes plataformas que te permiten de manera gratuita e intuitiva crear infografías. Descubre las diferentes opciones y elige la que más se adapte a ti. Explora tu creatividad.

Diseña tu infografía

Prueba a dibujar unos bocetos como paso previo a tu creación final. Este método permite organizar las ideas al mismo tiempo que ayuda en el proceso de conversión de ese texto en imagen. Para llamar la atención de tu audiencia, la infografía debe provocar impacto. Algunos de los elementos que facilitan esta conexión con el espectador es elegir un fondo de imagen de color neutro, como un blanco, tierra o negro. El tipo de letra debe ser legible al mismo tiempo que atrayente para tu público. Los gráficos e ilustraciones son un recurso imprescindible que apoya tu oratoria. Así mismo, el diseño debe ser pensado para el dispositivo electrónico donde será expuesta.

Entusiasta de la cultura en general. Apasionada de la literatura. En su mundo, ciencias y letras van de la mano. Creativa, resolutiva y en constante aprendizaje. Cinéfila de corazón, le encanta pasar el tiempo descubriendo nuevos metrajes. Ahora le ha tocado el turno al Marketing Online